El mundo actual es sin duda un
mundo completamente diferente al mundo en el cual vivieron nuestros ancestros,
pues hemos cambiado diversos aspectos, tales como el estilo de vida, gustos
musicales, prioridades en cuanto a la satisfacción de necesidades, entre otros.
Nos encontramos en un mundo en el quelas marcas se han convertido en parte de
nosotros, son nuestro estilo de vida, nuestra religión.
Antiguamente, el consumidor se
contentaba con comprar un producto que se adecue a su bolsillo, y pueda
satisfacer su necesidad, dejando de lado el valor de la marca; y si tenían
preferencia por una marca específica, lo hacían mayormente debido al precio o
calidad.
Hoy en día las características del producto ya no juegan un papel tan importantes como antes, ya que la marca se ha convertido en el factor predominante al momento de la elección o toma de decisión de compra del consumidor, pero ¿Cómo sucedió esto? ¿A qué se debe esta preferencia tan religiosa por una marca específica?

Esta es la pregunta que se
realizan muchos, qué tanto es capaz de llegar a fondo una marca en la mente de
unconsumidor, o a qué punto se puede fidelizar una persona, para consumir una
marca por el resto de su vida, convirtiéndola en un complemento para sí misma.
Si nos enfocamos un poco más al
mercado peruano, nos daremos cuenta de que este “fenómeno” o “tendencia” ya se
presenta continuamente y cada vez con más fuerza, los peruanos tendemos a
identificarnos con algunas marcas específicas, esto especialmente si se brinda
un sentimiento nacionalista (el amor por el país, el orgullo de ser peruano, o
hace conocido el Perú en el mundo, entre otros), entre las marcas más
resaltantes podemos mencionar a “Inca Kola”, “Gloria” y “Gastón Acurio”.
Inca Kola ha
sabido posicionarse en la mente del consumidor peruano de tal manera que no
haya producto alguno que pudiera vencerlo en cuanto a la preferencia del
consumidor, esto se debe a que todos los peruanos levamos la marca no sólo la
mente, sino también en “el corazón”, o al menos eso es lo que nos han hecho
creer a través de los años. Y es tal la devoción a esta marca que somos capaces
de consumirla con todo tipo de comidas, el cualquier ocasión, estación, e
incluso hemos llegado a consumir el producto en helado. ¿Habrá algún día una
marca más poderosa que “Inca Kola” en el mercado peruano? ¿Podrá el peruano
dejar de consumir el “Sabor Nacional”? ¿“Inca Kola” algún día dejará de
“combinar con todo“?
Cuando hablamos de la religión
con relación a las marcas, debemos de analizar los dos puntos de vista, tanto
el del empresario como el del consumidor, para evitar opiniones negativas o
exclusivas al respecto, que pudieran dificultar la comprensión de esta
tendencia.
Desde el punto de vista del
empresario, esto es beneficioso, y es lo que todo empresario debe buscar para
su marca,” fans”, “devotos”, consumidores capaces de creer en la marca, pensar
en la marca y vivir a través de ella, y no pensar en otra más al momento de la
toma de decisión de compra. Pues este tipo de consumidores son los que nos
generaran una rentabilidad fija para la empresa, y se encargarán de promocionar
nuestra marca a los diversos medios con los que tengan contacto.

Por lo tanto, existen muchos productos que
tienen un alto potencial para poder desarrollar una religión con el consumidor;
sin embargo esto no se ve explotado. Es necesario, crear una ventaja competitiva
y diferenciadora, y poco a poco ir desarrollando esa necesidad o complemento en
la mente del consumidor, para que este vea a nuestra marca como parte de sí
mismo y no como un producto de consumo común.
Por: Mónica Jazmín Díaz Tohalino